Microblading es una técnica que se hace con navaja y de manera manual.
Es una técnica para todo tipo de piel pero, es más aconsejable para pieles secas, normales y mixtas. Entre el primer y el tercer mes después del tratamiento se puede hacer un relleno si se desea. En ese relleno, lo que hacemos es corregir técnica y repasar trazos que no hayan pigmentado correctamente al igual que tapar huecos e intensificar el color.
La micropigmentación se hace con un instrumento llamado dermógrafo, con una aguja de punta para dibujar el pelo y el sombreado. Esta técnica se le recomienda a gente con todo tipo de piel especialmente a pieles grasas. El demógrafo también es el aparato que se utiliza para el eyeliner y para el perfilado y el relleno de los labios. Para ambas técnicas se utilizan pigmentos formados por partículas muy pequeñas, en base de aceite y que deben de ser hipoalergénicos.
