La consulta y el diagnóstico previo son el paso clave para garantizar resultados en cualquier tratamiento. De esta forma podemos identificar las necesidades específicas de nuestros clientes y encontrar el protocolo perfecto para ayudarles a alcanzar sus objetivos – también considerados como nuestros.
El Ultra Flash Body combina diferentes técnicas manuales con la última aparatología adaptándose a las necesidades de cada zona del cuerpo.
La preparación es clave, por lo que el tratamiento comienza con una estimulación técnica manual en la zona que se vaya a trabajar. Más adelante se usa la aparatología para destruir células adiposas y mejorar la elasticidad de la piel. Termina con un masaje reafirmante y drenante que potenciará los resultados del tratamiento.
El protocolo puede adaptarse a los objetivos de cada cliente, que una vez informe de sus necesidades a la especialista, puede confiar en que la evolución del proceso será la deseada.
Los resultados serán visibles desde el mismo día en que se realice el tratamiento. Aunque para un resultado que perdure más en el tiempo, las sesiones podrán repetirse cada 15 días y alternarse con una sesión de radiofrecuencia cada dos semanas. Es importante recordar que los resultados pueden variar según la necesidad que presente cada cliente, su edad, estilo de vida y estado corporal. Por ello llevar una rutina saludable y activa siempre influirá de manera positiva.
