ENTREVISTA A MERCEDES DE LA ROSA

Una vida consciente y plena gracias al yoga

Biografía

Estudié Periodismo y Relaciones Internacionales y empecé a trabajar con 21 años, tras haber vivido en Italia y Londres. Me dedicaba a escribir reportajes de temática social (esos que nos cuesta leer y digerir: guerras, abusos sexuales en la infancia, etc.) en distintas partes del mundo. Viajé mucho y eso me ayudó a abrir los ojos a distintas realidades. Yo bailaba mucho, pero con la vida que llevaba era muy complicado tener una rutina, y descubrí el yoga. Poco a poco fui viendo cómo la práctica me hacía más consciente. Aprendí a cuidarme por dentro y por fuera, y a confiar. Y fue la vida, la que me llevó a ser empresaria y yogui. Yo no tenía ni planes ni preparación para esto, mi escuela ha sido (y sigue siendo) la de aprender por observación, esfuerzo e intuición.

¿Por qué decides emprender y crear Zentro Urban Yoga?
Este proyecto empezó en Barcelona en 2005. En aquel entonces no existían casi estudios. El yoga era todavía algo muy freaky y mi socia -que es quien me propuso montarlo- y yo, decidimos acercar esta práctica a la gente como algo urbano, como una herramienta física y mental para integrar en nuestras vidas, sin necesidad de dejar de comer carne, beber vino o tener que vestirnos de blanco.

Nosotras habíamos practicado yoga en EEUU, Londres, etc. Eran lugares donde veías a la gente con su esterilla por la calle, y queríamos ver lo mismo aquí. Empezamos a organizar masterclass de yoga para 3.000 personas en lugares emblemáticos de las ciudades (Plaza mayor, Paseo del Prado, etc.) para que la gente viera que aquello no era para gente rara, y el yoga poco a poco se fue expandiendo.

¿Cuál es la filosofía de este proyecto?
Nuestra filosofía es la de proporcionar herramientas para vivir la vida con la mayor salud, plenitud y conciencia posible. Que sepamos, tenemos esta vida ¿por qué no tratar de que sea un viaje maravilloso? La mayoría son herramientas milenarias adaptadas a nuestra realidad, pero que siguen sirviendo ¡y mucho!

¿Qué significado tiene para ti el yoga?
Uno de los significados de la palabra “yoga” es unión. Y para mí, el yoga es eso. Es unión conmigo, pero también con todos y todo lo que me rodea. Me ha enseñado a escucharme, a respetarme, a cuidarme, y a vivir desde otro lugar, con mucha más aceptación, compasión y conciencia.
“Nuestra filosofía es la de proporcionar herramientas para vivir la vida con la mayor salud, plenitud y conciencia posible”.

¿Recomendarías a todo el mundo probarlo y ser constante en el tiempo? ¿Qué beneficios tiene?
¡Sin duda! Lo bueno del yoga es que todo el mundo, de cualquier edad o condición, puede practicarlo. Desde niños, embarazadas, deportistas, personas que nunca han hecho ejercicio, personas mayores… ¡Y los beneficios son ilimitados! Siempre pienso que cuando los enumero todos, nadie me cree (jajaja), por eso si me preguntan, lo que suelo decir es: “mejor pruébalo, y luego me cuentas tú lo que has sentido”.

Por simplificar, los beneficios se pueden agrupar en dos grandes bloques: los físicos/orgánicos y los mentales. Y yo he visto transformaciones muy profundas de ambos. A nivel físico: tonifica los músculos del cuerpo, proporciona más flexibilidad, fuerza, resistencia, permite oxigenar y movilizar todas las células y órganos del cuerpo, y equilibra todos los sistemas: circulatorio, nervioso, digestivo, endocrino, etc. Nos enseña a escuchar el cuerpo, cómo está y qué necesita. Y como consecuencia de la práctica, te sientes más ligero, fuerte y desaparecen muchas dolencias (contracturas, tensiones, etc.) con las que probablemente convivimos y ni lo sabíamos. A nivel mental: nos enseña a traer la mente al presente, al aquí y al ahora, a través de la respiración, a dejar de deambular entre pasado y futuro, que es lo que nos provoca estrés, ansiedad y nos dificulta vivir plenamente. Si practicamos yoga regularmente disminuyen los niveles de estrés y todos los síntomas asociados a estos estados: falta de atención, concentración, agitación, insomnio, etc por lo que nos permite sentirnos más serenos y vivir más presentes y felices.

¿Crees que las personas son conscientes de la necesidad de conectar con uno mismo a través del deporte?
Yo creo que cuando haces algún deporte o práctica, hay algo en ti que te dice que aquello te hace sentir bien, por lo que quieres más de eso. Y yo sí creo que poco a poco vamos escuchándonos y entendiéndonos más, y conectamos con distintos aspectos físicos, mentales y emocionales. Pero para eso, ¡hay que empezar! “Lo bueno del yoga es que todo el mundo, de cualquier edad o condición, puede practicarlo”

¿Cómo ha cambiado tu vida a nivel interior y exterior desde que lo practicas?
¡Muchísimo! A nivel físico, yo pensaba que estaba muy en forma porque había bailado mucho durante años, pero el yoga me ha dado mucha más fuerza (física y mental), tonificación, flexibilidad y agilidad. Además, yo sufría de insomnio, pero de los de no dormir ni una hora, y gracias al yoga entendí muchas cosas que me permitieron volver a dormir. El yoga me ha enseñado a vivir de otra manera. Desde otro lugar. A aceptar la vida tal y como viene, y me ha dado herramientas para poder disfrutar de cualquier circunstancia: de lo bueno, de lo malo, de lo regular… Creo que no somos conscientes de muchas cosas que somos y tenemos en nuestras vidas, y la práctica de yoga y meditación te hacen tomar conciencia y te permiten vivirlo con más conciencia y amor.

A largo plazo, ¿dónde te ves?
No suelo pensar mucho en el futuro. Sí tengo una dirección clara, y confío en que, lo que viene, conviene. A la larga, me encantaría vivir en el campo y sé que seguiré dedicándome a esto, ¿en qué formato y cómo? La vida me lo dirá.

-Relación con la belleza:

¿Qué es la belleza para ti y cómo la vives en tu rutina?
Para mí la belleza es armonía. Y siempre nace de un equilibrio, de una serenidad, de un orden. Yo necesito rutina; con mis prácticas, con mis horas de sueño, con una alimentación saludable, con contacto con la naturaleza y la gente que quiero. Eso es lo que me permite sentirme bien por dentro y por fuera.

¿Qué o quién te inspira en tu día a día?
¡Tanta gente! Para empezar, mi madre. Es un increíble ejemplo ¡de tantas cosas! Pero también amigas, mi marido, mi hermana, mi equipo. No soy nada mitómana, pero tengo la suerte de tener a gente maravillosa y muy inspiradora a mi alrededor. Me encanta escucharles y aprender de ellos.

¿Quiénes son tus iconos de belleza?
Para mi la belleza no es perfección, me gustan las mujeres inteligentes, que transmiten armonía y serenidad en distintos aspectos de su vida, y que saben abrazar y aceptar el paso del tiempo, sin luchar contra él. Me da muchísima pena ver a mujeres que dejan de ser ellas, por no tener arrugas o flacidez. Creo que como personajes públicos, Audrey Hepurn, Carolina de Mónaco o Caroline de Maigret son buenos ejemplos de eso, también actrices como Naomi Watts , Cate Blanchet o Julianne Moore.

¿Cuál es el mejor consejo que te han dado?
No tengas miedo a ser tú misma.

-Cuestionario Beauty:

¿Cuál es tu rutina de cuidados?
Mi rutina no es nada sofisticada, y consiste en cenar y acostarme pronto, dormir un mínimo de 7h, practicar yoga y meditación todos los días, lavarme la cara mañana y noche (dos veces), hidratarme, exfoliar mi piel un par de veces por semana, alimentarse saludablemente (no tomo refinados, azúcar, ni carne desde hace 25 años), beber agua, tomar algunos suplementos, y ser lo más feliz posible.

Un truco o producto infalible
Quizás por haber sufrido insomnio, pienso que dormir es clave, porque te hace sentirte bien y poder ver la vida con otra perspectiva. Por otro lado, he descubierto el retinol recientemente y me encanta.

Cómo cuidas tu belleza desde el interior
Claramente la belleza nace del interior, y pienso que el estrés y la ansiedad son los máximos disruptores. Por eso es tan importante para mí la práctica de yoga y meditación, porque ayuda a bajar toda la tensión con la que vivimos. Y esa relajación se nota inmediatamente en la cara, en la piel, en lo que irradiamos. También necesito estar en la naturaleza y dar y recibir amor de la gente que quiero.

Asignatura pendiente (en lo que a belleza respecta)
Soy un desastre para hacerme tratamientos (tanto faciales como corporales), pero alguna vez que lo he conseguido, he visto resultados maravillosos. Así que creo que debería encontrar un hueco para hacérmelos.